Quirón en la carta astral – El asteroide de la herida eterna

Tarda 51 años en darle una vuelta completa al sol y permanece durante aproximadamente 5 años en cada signo.

Quirón era un centauro, hijo del Dios Crono y la Ninfa Fílira, por su herencia tiene el poder de acceder a ambos mundos, el de los dioses y el de los mortales.

De hecho su condición de centauro implica el hecho de ser mitad hombre (conexión a lo divino, lo espiritual) y mitad caballo (conexión con los instintos, las pasiones).

Quirón sintió el rechazo de su madre que se avergonzó de él, pero este recibió ayuda y educación por parte de los dioses hasta convertirse en un gran maestro; Enseñaba artes, ciencias, adivinación, caza, música y curación.

No se trató de un gran benéfico, sino de un maestro cuya única búsqueda era el conocimiento y desarrollo del hombre.

En contraste Quirón sufrió una enfermedad incurable. “la herida representa la fragmentación del ser que no podrá ser curado a menos que recobremos esa unidad perdida” Le cedió su inmortalidad a Prometeo, ya que deseaba morir, esa decisión nos dice que debemos abrazar la muerte también como parte de la vida.

La casa astrológica donde el este situado nos habla de los aspectos de la vida en los cuales podemos ser más instintivos e irracionales, donde nuestro aspecto animal adquiere más fuerza, donde somos más capaces de transcender mediante nuestro propio esfuerzo, dejando aflorar nuestro ser espiritual en combinación con la energía animal y utilizándola para nuestro crecimiento hacia otros niveles del ser.

También puede mostrarnos el aspecto de la vida en el cual somos más sensibles al rechazo, donde quizás ya lo hemos vivido de forma real o imaginaria abriendo una herida en nuestra afectividad que despierta ante el más mínimo roce.

La posición de Quirón nos habla de las experiencias vitales que necesitamos para nuestra evolución, cada experiencia tiene una lección implícita de la cual aprender y así poder acceder a un nivel más alto de madurez.

En las personas que no quieren asumir sus dolencias, Quirón actúa como inductor de experiencias penosas que se irán repitiendo hasta que comprendamos su significado y lo asumamos. Nos enfrenta a pruebas pero asegurándonos protección y ayuda para superarlas.

Su influencia no puede definirse como mala o buena, él trabaja como un desestabilizador que nos saca de la zona cómoda y nos obliga a crear un orden propio sumergiéndonos en experiencias dolorosas que provocan un despertar de consciencia.

Quirón representa la capacidad que tenemos para hacer algo por otros pero pensamos que fallamos para hacerlo con nosotros mismos. Nos ilumina increíblemente acerca de situaciones conflictivas que envuelven a otros pero nos cuesta entender como ponernos en acción para solucionarlos.

En un horóscopo demuestra dónde y cómo podemos aflorar nuestro potencial y realizar grandes hazañas fuera de la cotidianidad.