Planeta Quirón: Descubre su significado en tu Carta Astral

Quirón es un pequeño planetoide cuya trayectoria oscila entre los planetas de Saturno y Urano. Tarda aproximadamente 50 años en dar una vuelta completa alrededor del Sol y mientras tanto se posicionará en los diferentes planetas del sistema solar generando diferentes consecuencias en la vida de los nativos zodiacales.

En Astrología, en razón del posicionamiento de Quirón en su Carta Astral, las personas tienen determinados desafíos y heridas que sanar ya que se considera a este planeta “El Sanador Herido”.

Entérate mucho más acerca de la leyenda de este planeta, su influencia y sobre cómo puede ayudarte a evolucionar y resolver tus mayores desafíos.

La Leyenda de Quirón

Según una antigua leyenda griega, Quirón era hijo de Filira y Saturno, fruto de un amor prohibido. Con el fin de huir de la vergüenza, Saturno convertido en caballo huye y su madre encomienda el cuidado de Quirón a los dioses.

Quirón es un centauro (mitad caballo, mitad humano) y representa aquellas características de nuestra personalidad que no asumimos, los defectos de nuestro ser que nos avergüenzan frente al mundo.

Los dioses ayudan a Quirón a transformarse en un sabio, una especie de chamán que tiene la capacidad de ayudar a los demás a sanar y a transformar sus miserias y peores rasgos en fortalezas, en oportunidades para evolucionar.

Quirón en tu Carta Natal

Dependiendo del signo en el cual se encontraba posicionado el planeta Quirón al tiempo de tu nacimiento, tendrás determinados defectos o desafíos que traspasar en esta vida como parte de tu evolución humana y espiritual.

Quirón representa ese defecto que puede transformarse en tu mayor fortaleza, la sabiduría para encontrar en nosotros mismos aquello que es necesario cambiar para ser mejores y más felices.

Veamos ahora cuál es esa gran herida que señala Quirón en razón de su posición en tu Carta Natal:

En Aries:

Complejos físicos imaginarios, imposibilidad de avanzar con confianza hacia lo que realmente deseamos realizar.

En Tauro:

Conflictos para detectar la propia fortaleza. Dificultades para manejar el dinero y miedos irracionales a las pérdidas monetarias.

En Géminis:

Imposibilidad de comunicar adecuadamente las ideas propias. Tendencia a dejarse a infuir en exceso por las opiniones ajenas.

En Cáncer:

Temor al abandono. Complejos y traumas respecto de la figura materna. Sentimientos imaginarios de rechazo y abandono.

En Leo:

Necesidad excesiva de agradar a otros, imposibilidad de mostrarse al mundo con autenticidad. Miedo a hacer el ridículo.

En Virgo:

Tendencia al inconformismo. Miedo a fallar que paraliza la acción y frustra al individuo.

En Libra:

Imposibilidad de socializar con los demás. Temor a ser víctimas de engaños en injusticias. Negativa a dejar fluir los vínculos.

En Escorpio:

Tendencia a las conductas auto destructivas. Incapacidad para vincularse de modo profundo con otros. Dificultades a la hora de disfrutar del placer sexual.

En Capricornio:

Conflictos con la autoridad en razón de los traumas vinculados a la figura paterna. Inconformismo y frustración. Necesidad de excesivo reconocimiento.

En Sagitario:

Imposibilidad de adaptación a las normas sociales. Desconfianza en los demás y negativa a delegar por temor a ser traicionado.

En Piscis:

Excesiva vulnerabilidad. Imposibilidad de relacionarse con los demás sin caer en la dependencia emocional.

En Acuario:

Dificultades para integrarse a grupos sin perder la individualidad. Conflictos para defender la libertad y las propias ideas.